Sin lugar a dudas uno de los momentos más esperados para los profesionales en cualquier campo y sector es el de fin de año y vacaciones partes de época, para viajar, para dedicar más tiempo a su familia y amigos, las actividades de su interés o simplemente relajar. ¿A quién no le gustaría?
Pero tarde o temprano tenemos que volver a la realidad y reincorporarse a la rutina de nuevo, pero lo que para algunos es trivial para una buena parte de los trabajadores es un gran sufrimiento tanto físico como emocional, llamado después de las vacaciones o el síndrome de estrés pre-empleo, que en última instancia afecta la productividad del trabajador.
Este síndrome se caracteriza por una sensación de falta de energía, la motivación o la tristeza de volver al trabajo, causada por la ruptura de la adaptación o de transición entre el tiempo de ocio y descanso y la rutina de trabajo.
Todavía no se puede montar un perfil exacto de un empleado que se ve afectado por este tipo de depresión, pero es posible llevar a cabo una aproximación basada en características personales y sus alrededores.
En consecuencia, las personas que tienen menos tolerancia a la frustración y son menos resistentes, tienen más probabilidades de caer en el síndrome post-vacacional.
Del mismo modo, es más probable que sufran este tipo de síndrome trabajadores que tienen la oportunidad de hacer grandes períodos de vacaciones.
Representa la mayor desconexión del trabajo y el desarrollo de diferentes hábitos durante el periodo vacacional. Según los expertos un hábito requiere de 21 días para ser incorporados en la vida de uno y un mes de vacaciones es tiempo más que suficiente para una persona acostumbrarse a los nuevos hábitos de vida.
Otro factor importante (si no el principal) que influye en los trabajadores y los hace más susceptibles a la depresión post-vacacional es tener que enfrentarse a un ambiente de trabajo hostil, desmotivacional, repetitivo, donde no hay reconocimiento, etc.
El síntoma principal de esta enfermedad es la apatía, seguido de fatiga o falta de energía y falta de concentración para realizar las tareas. En algunos casos puede manifestarse de otras maneras como los trastornos del sueño, nerviosismo, altos niveles de estrés o tristeza, que para cualquiera que trabaje con el servicio / soporte a los usuarios pueden ser muy mal.
En los casos más extremos, el trabajador afectado puede experimentar ansiedad, dolores de cabeza constantes, palpitaciones y malestar físico.
Básicamente estos son los síntomas principales, cada persona puede experimentar de una manera diferente. Lo que caracteriza es su momento de aparición: después de un período de descanso y los expertos determinan que en promedio la duración habitual del síndrome es de aproximadamente 15 días.
Para evitar el síndrome más importante es hacer la transición de vacaciones al trabajo es lo más suave posible, en consecuencia, cualquier medida que pueda hacer de este proceso algo gradual y evite un cambio brusco será positivo.
Pero no hay necesidad de bombos y platillos, combatir este mal es más fácil de lo que crees, sólo tiene que utilizar la fuerza de voluntad y la aplicación de algunas medidas, tales como:
– Levantarse temprano que de costumbre unos días antes de volver al trabajo;
– Conseguir el periodo para realizar actividades saludables que se pueden incorporar después del día a día, como cualquier deporte, empezar a cultivar hábitos saludables, la buena nutrición, la lectura, etc.
– Reanudar el trabajo poco a poco (un ojo en las prioridades), evitando grandes cargas de trabajo durante los primeros días;
– El trabajo de su psicológica, interpretar positivamente el retorno a la rutina y evitar pensar en el trabajo como una carga, una carga necesaria, ya que esto puede hacer que los síntomas se vuelven más pronunciados;
– Centrar la atención en el lado positivo del trabajo como los frutos de su trabajo él o rendimiento, las relaciones con los compañeros de trabajo ganados o lo que genera la motivación;
– Para reanudar el ritmo, el plan de actividades que tienen lugar cada semana (en el trabajo y en la vida personal) y la forma de acomodar adecuadamente en su calendario. Recuerde que debe hacer una planificación realista no frustrar;
– En el momento de las fiestas de fin de año y las vacaciones de la gente tiende a adoptar nuevas actitudes: ser más solidario, más ligero en relación con la vida cotidiana, así que por qué no van a cultivar este estado de ánimo durante todo el año, no sólo en este momento?
– Añade un momento de diversión a su vida cotidiana. Nada para combatir el sentimiento de tristeza por el fin de los días festivos y vacaciones, como la risa. Haga algo para cerrar el día con una sonrisa, reunirse con amigos o ver su programa favorito.
Puedes ser más feliz todo el año y no sólo en un momento determinado. 😉
(fuentes: recluIT, Contessa)